PLANES DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL ALINEADOS A LA AGENDA 2030 SERÁ EL FIN DE LA PRODUCCIÓN AGRÍCOLA

La implementación de los POT y los ODS en Costa Rica amenazan con reconfigurar el uso del suelo, sacrificando sectores productivos en favor de políticas globalistas

Por Catalina Vargas H.

San José, Costa Rica. 27 de setiembre del 2024. –El Conservador CR-   Los Planes de Ordenamiento Territorial (POT) están estrechamente relacionados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Así también, desde ONU-Hábitat están promoviendo una Nueva Agenda Urbana (NAU), que ofrece directrices para la planificación de ciudades sostenibles, inclusivas y resilientes. Para ello recomienda que los POT estén enfocados a regular el uso del suelo y los recursos naturales, a disminuir las zonas de producción para lograr lo que ellos llaman desarrollo sostenible. 

Los POT deben ser sostenibles y junto con el Plan de Ordenamiento Catastral (POC) son cruciales para alcanzar los ODS. Según sus principios, es importante regular o incluso eliminar ciertas actividades, como la producción agrícola, ya que -según ellos- la degradación ambiental y el cambio climático son producto de dichas actividades.

El cumplimiento del ODS 11 “Ciudades y comunidades sostenibles” aborda el concepto de ciudades inteligentes o de 15 minutos, también llamados Ecobarrios según el Instituto de Vivienda y Urbanismo (INVU) (ver aquí). Como lo menciona y promociona el Foro Económico Mundial (WEF). Este concepto implica la sectorización de los asentamientos humanos y su ubicación en áreas específicas, alejadas de las zonas de protección ambiental. En Costa Rica, el Instituto de Fomento y Asesoría Municipal (IFAM) también está promoviendo esta idea que transfiere a las municipalidades, aunque su implementación efectiva en todo el territorio dependerá de la aprobación de los POT.

Las metas del ODS 11 que se vinculan con los POT, dicen:

• “Meta 11,3 De aquí a 2030, aumentar la urbanización inclusiva y sostenible y la capacidad para la planificación y la gestión participativas, integradas y sostenibles de los asentamientos humanos en todos los países.
• Meta 11.b …aumentar considerablemente el número de ciudades y asentamientos humanos que adoptan e implementan políticas y planes integrados para promover la inclusión.”

Por otro lado, de acuerdo al documento Contribución Nacionalmente Determinada de la Secretaría Ejecutiva de Planificación Sectorial Agropecuaria “En el año 2030, el país aumentará y mantendrá su cobertura boscosa al 60%”. Menciona, además que deben fomentar la adaptación de ecosistemas y Patrimonio Natural del Estado dentro y fuera de las zonas de reserva, lo que implica que las zonas en producción agropecuaria se verán afectadas por el interés superior de conservar la naturaleza y la recuperación de tierras degradadas por el uso agrícola.

La Política Nacional de Hábitat 2020-2040 para el Ordenamiento territorial, desarrollo humano y vivienda en Costa Rica (ver aquí), es la política vigente y está alineada totalmente a los ODS. En el prólogo dice:

“Las Políticas Urbanas Nacionales son uno de los principales instrumentos de gestión promovidos por la Nueva Agenda Urbana. Son además un compromiso asumido por los Estados Miembros de la ONU durante la Conferencia Hábitat III (Quito, 2016). En esta conferencia global los Estados Miembros se comprometieron con la sostenibilidad social y ambiental de las ciudades y asentamientos humanos …” (p.2)

El documento menciona en el eje 3, desarrollo territorial sostenible: “17. Se impulsará la integración de soluciones basadas en la naturaleza, en la planificación territorial, de modo que permita la gestión y regeneración sostenible de la biodiversidad, así como de los bienes y servicios ecosistémicos asociados.” (p.36)

Todo lo demás con respecto a la Ley Política Nacional de Ordenamiento Territorial 2012-2040 y otros, fue derogado en setiembre del 2023 (ver aquí). 

En el año 2024 fue publicada por el INVU la “Guía para la integración de la Gestión del Riesgo de Desastre y la Acción Climática en los Planes Reguladores Cantonales.

Las metas del ODS 11 es lo que ya está desarrollando Costa Rica en sus POT, porque es precisamente el riesgo de catástrofes por el cambio climático que pretenden trasladar asentamientos humanos.

Por lo anterior, la Junta Directiva del Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) en el Acta de la Sesión Ordinaria N° 6628 del 29 de febrero de 2024, posteriormente publicado en La Gaceta; dice lo siguiente:

“1º—Que el Ministerio de Vivienda y Asentamientos Humanos como rector en materia de Ordenamiento Territorial y el Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo como ente competente para elaborar la normativa supletoria en Ordenamiento Territorial y Planificación Urbana, asumen el compromiso con el FMI de elaborar una guía para la incorporación de gestión del riesgo y cambio climático en los planes reguladores cantonales para publicarla en febrero de 2024.”

En esa misma línea, el plan de Levantamiento Catastral para Completar el Territorio Nacional (POC) que se está desarrollando en este momento por parte del Registro Nacional, va a desencadenar una nueva forma de ordenamiento del territorio, tal como lo proponen los organismos internacionales.

Según ellos, el avance del POC, es una contribución con el ordenamiento territorial y un requisito para los POT, pero principalmente hace énfasis en que busca favorecer la protección y el manejo del medio ambiente, porque permite identificar las propiedades que estén dentro de zonas silvestres protegidas y así mantener una clara vigilancia. (Ver aquí)

El ODS 11 se relaciona entre otras cosas, a la transformación del uso de los terrenos, bajo el desarrollo de los POT que levantan los gobiernos locales en cada cantón; la Ley del Ordenamiento Territorial, tiene un impacto profundo en el sector productivo nacional, ganadero y agrícola, ya que regula el uso del suelo, define las actividades y buscan ampliar las áreas boscosas, disminuyendo el sector de impacto agrario en todas las regiones.

La zonificación del uso de suelo determina las actividades que son permitidas en cada región, esto incluye la delimitación de áreas agrícolas, de conservación, residenciales y zonas urbanas. La ley promueve incluso por encima de los intereses de las personas, la protección de los recursos naturales, como suelos, agua y biodiversidad. Esto implica que ciertas áreas ricas en recursos naturales pueden ser restringidas definitivamente para actividades agrícolas o para la producción de monocultivos que consideren que puedan dañar el entorno, disminuyendo la producción nacional y aumentando la pobreza. 

En conclusión, el ODS 11 se enfoca al uso de la tierra, el mismo ya está en avanzada a través de las Leyes de Planes de Ordenamiento Territorial que faculta a las municipalidades a realizar cambios drásticos en el uso del suelo. Es urgente detenerlo ya mismo, antes de que sean aprobados en todos los cantones del país generando una transformación en el uso de la tierra, llevando a desaparecer la producción primaria y el desabastecimiento nacional. 

Sin lugar a dudas, el contenido de la Agenda 2030 y todo lo relacionado a ella es sumamente marxista, ha sido un fracaso su implementación que alcanza un 15% en el mundo, aunque en Costa Rica ha avanzado en un 55%, por esa razón el plazo para su implementación será el año 2045, como fue mencionado en la reciente Cumbre del Futuro en la Asamblea General de la ONU 2024.

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