Por Catalina Vargas H.
10 de octubre del 2023. San José, Costa Rica - El Conservador CR- Desde hace ya tiempo el Lic. Geovanni Bello interpuso demandas contra la farmacéutica Pfizer, el Ministerio de Salud (MINSA) y contra la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología (CNVE). Las demandas han caminado también, en la dirección para que el contrato por la compra de vacunas COVID-19, entre el Estado costarricense y la farmacéutica sea publicado.
El Tribunal de Casación de lo Contencioso Administrativo y Civil de Hacienda rechazó la acumulación de procesos, es decir habrá un juicio específicamente contra Pfizer por la inyección COVID-19 en sí misma y otro juicio por los nombramientos ilegales que realizó la Comisión cuando fue implementada la vacunación obligatoria.
El Tribunal Contencioso declara en el por tanto que: "Se declara improcedente la acumulación de los expedientes 22-004574-1027-CA y 22- 000904-1027-CA. Continúense con la tramitación por separado, dejando copia de esta resolución y notificando a las partes en el otro expediente”.
Las causas señaladas en este proceso y que llevan a tal decisión es que “…sobre la conducta del Ministerio de Salud que la causa de ilegalidad del acto impugnado, radica en la FALTA DE FUNDAMENTO Y SOPORTE LEGAL, lo anterior en razón de que la vacuna del Covid-19 como todo producto farmacéutico requiere un registro sanitario”. Además, “…la Comisión Nacional de Vacunación serían DESVIACIÓN DE PODER y NULIDAD ABSOLUTA POR VENCIMIENTO DE LOS NOMBRAMIENTOS”.
Ante esta situación, el Estado, representado en la Comisión y el Ministerio de Salud recibe un duro golpe, ya que es evidente que ni teniendo todas las demandas juntas lograron “defenderse” de las claras acusaciones interpuestas por el abogado Bello y otros, siendo en adelante que con juicios independientes por las distintas causas, podría ser más factible para los demandantes lograr una victoria, que sería la victoria de todos los costarricenses contra el “statu quo” sanitario del país y la “big pharma” representada en Pfizer; la que podría ser una condena histórica.
El pueblo tiene derecho a conocer la verdad de lo que contiene el contrato con Pfizer y también, de que los acuerdos tomados por la CNVE sean anulados por ausencia de legitimidad al momento de decidir obligar a la población a inyectarse con la sustancia génica experimental, tanto con las inyecciones de Pfizer como de AstraZeneca. Veremos justicia…
En otros hechos importantes, el abogado Bello también va muy adelantado y en camino a ganar una demanda relacionada con injurias y calumnias emitidas por la señora María G. Villalobos contra el abogado Bello, la señora es la esposa del ex miembro de la CNVE Hugo Marín Piva. La señora Villalobos injurió al abogado en redes sociales llamándolo “antivacunas”, entre otros agravios imposibles de mencionar. El triunfo en esta demanda es muy importante, porque sentará un precedente que condenará el término "antivacunas".
El agradecimiento al Lic. Bello y otros abogados que han llevado ha cabo una labor importante en la defensa de la dignidad de los ciudadanos costarricenses.
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En la reciente reunión de los "salvadores del planeta", donde el presidente de Costa Rica Carlos Alvarado, sólo fue a hacer el ridículo, nos terminaron de vender, ningún medio nacional ha expuesto la barbarie que es la capitalización de la naturaleza por el globalismo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha atribuido la potestad de interferir en la soberanía de todos sus países miembros para la toma de decisiones en cuanto al manejo interno de la pandemia del COVID -19. Y así lo pretende continuar haciendo, de firmarse un acuerdo internacional donde dirán cuales serán las medidas que tendrán que adoptar cada país frente a futuras pandemias.
Una vez más un gobierno de la República de Costa Rica aprovecha mientras el pueblo está entretenido con el juego mundialista en Catar de la Selección Nacional y le mete al pueblo un golazo.